La Luftwaffe realizó durante esta primera fase incursiones que lanzaban más de 100 toneladas de explosivos, en un número total de 57, con un total de 13.350 toneladas de explosivos y bombas incendiarias. Las Kampfgruppen realizaron durante ese mes de septiembre unas 200 salidas nocturnas, donde las defensas británicas declararon haber derribado unos 38 bombarderos enemigos. En octubre se atacó de noche a Londres todo el mes excepto en 7 noches, con un promedio de 190 salidas nocturnas. Durante este mes, la caza nocturna y el Mando Antiaéreo proclamaron el derribo de 31 aviones enemigos. Pero se sabe que hasta final de 1940, los cazas nocturnos apenas derribaron 3 bombarderos enemigos.
De todas formas, el objetivo de rendir al gobierno británico jamás se conseguiría, sino por el contrario, la moral del gobierno y el pueblo de Londres se incrementó. Para el jefe del Mando de Caza y para el jefe del Grupo de caza 11, estos ataques fueron un alivio que llegó justo en el momento cuando se sentían pesimista si la Luftwaffe seguía bombardeando los aeródromos del sudeste inglés. La larga ruta fue cada vez mejor controlada por las defensas inglesas, logrando cada vez incrementar las bajas de los alemanes. Pero en general, ninguno de estos ataques se consideró catastrófico, y la mayoría de la población londinense salió de la ciudad al campo, o se refugiaba en el metro.
Durante las diferentes fases de la batalla German Göering ordenó distintas directrices tratando de corregir el transcurso de la batalla.
El objetivo de la destrucción de la fuerza aérea enemiga queda aclarado por Göering, como el objetivo primordial, dejando como objetivos secundarios a la industria aeronáutica británica. Así lo ratifica en el punto número 6, de su directiva del 15 de Agosto: “Hasta nueva orden, las operaciones van directamente dirigidas contra la Fuerza Aérea enemiga, incluyendo la industria aeronáutica enemiga dentro de las zonas de las distintas Luftfloteen. Los barcos y bases navales serán solo atacados cuando las circunstancias sean propicias. Por el momento, otros objetivos serán ignorados. Debemos concentrar nuestros esfuerzos en la destrucción de la Fuerza Aérea enemiga.”
El fracaso del Junkers Ju 87 Stuka sobre Inglaterra: Era evidente que la importancia del Stuka tendría que disminuir durante la batalla de Inglaterra. Concebido como avión de apoyo directo al ejército, sirviendo de artillería móvil; los Stukas no tenían un ejército al cual apoyar, además de contar con un alcance modesto, a pesar que, durante el ataque a Noruega, existían la versión Ju 87R, equipada con depósitos de combustibles bajo las alas. Por otro lado, el incierto dominio alemán del espacio aéreo inglés, trajo consigo la ya conocida vulnerabilidad de este modelo ante la aviación de caza enemiga.
Por tal razón, German Göering había recomendado medidas especiales de escolta para proteger a los Stukas, planteando la siguiente solución, en el punto número 1 de su directiva del día 15 de Agosto: “la escolta de cazas para nuestras formaciones de Stukas debe ser reajustada, al concentrar el enemigo sus ataques en muestras operaciones de bombardeo en picado. Parece necesario disponer de tres Grupos de caza por cada Grupo de Stukas; uno de estos grupos queda juntos a los Stukas, y deben picar junto a ellos en sus ataques; el segundo vuela adelante y encima del objetivo a altitud media, para interceptar las defensas de cazas; el tercero protege a los atacantes por detrás, siendo éstos también necesarios para escoltar a los Stukas en su regreso a través del canal.” Se evidencia lo desesperado de la medida, que arrastraba necesarios cazas para las misiones de “casería libre”, necesarios para conseguir el dominio del aire sobre el sudeste inglés. Después del Blitz nocturno, y el consiguiente cambio de tácticas de los alemanes, al bombardear objetivos industriales, el Stuka volvería a la acción sobre Inglaterra para el mes de Noviembre, atacando nuevamente convoyes sobre el canal.
Con respecto a los monomotores Messerschmitt Bf-110 Göering decía en su punto número 5 de su directiva del 15 de agosto: “He dado repetidamente la orden que los cazas bimotores sean solo utilizados donde el radio de los cazas monomotores sea inadecuado, o donde sea pertinente asistir a los cazas monomotores para vencer en los combates. Nuestras reservas de cazas bimotores no es grande, debemos usarlos con la economía que sea posible.”
Comparación de los resultados de la batalla de Inglaterra con algunos postulados teóricos de preguerra: Como hemos venido diciendo, la concepción como arma táctica de la Luftwaffe, hacía de esta fuerza aérea efectiva en un escenario bélico que no estuviese mas allá de sus posibilidades en alcance de sus bombarderos medios, y cuya duración fuese lo más corta posible.
Estas condiciones se venían cumpliendo para la Luftwaffe a la perfección. A principios de septiembre de 1940, los aeródromos del Grupo de Caza 11 estaban al borde de la inoperatividad, además que el ritmo de batalla estaba dejando con escaso pilotos entrenados al Mando de Caza de la RAF. Esta era la visión de uso para la aviación que proponía el inglés Hugo Trenchard.
Esta situación se mantuvo hasta el día 7 de septiembre, cuando comienza el primer bombardeo diurno a Londres, situación que marcaría la pauta de acciones de la Luftwaffe. A partir de eses momento la aviación germana pasaba de un combate de carácter táctico, a uno de carácter estratégico, para el cual no estaba preparada. El resultado fue que ni se logró vencer a la RAF, (no se destruyeron los cazas ingleses porque no se logró paralizar su producción), ni tampoco se logró vencer a los británicos con el uso exclusivo del bombardero estratégico, como lo establecía Dohuet.
La aviación defensiva demostró su papel fundamental, gracias ahora del uso del radar, cuya participación no podía predecir Dohuet en 1921. Igualmente, la aviación de escolta defensiva fue muy necesaria para los alemanes, como lo predijo Trenchard, aunque esta función no fue cumplida por el avión a que le correspondía esta misión, el bimotor pesado Messerschmitt Bf 110, dejando obsoleta la idea del caza pesado “destructor” de principios de guerra. La necesidad de proteger a los bombarderos con el monomotor Me 109, hizo perder a la Luftwaffe la ventaja táctica en el combate aéreo de atacar desde gran altura, en picado y con sorpresa, a los Spitfire y Hurricanes.
Se demostró además la vulnerabilidad del bombardero en picado, base fundamental de la Blitzkrieg, en situaciones de combate en las que aún no se contaba con el dominio del espacio aéreo, situación contraria a lo acaecido en Polonia y Francia.
Para fines de noviembre de 1940, la Luftwaffe había perdido aproximadamente unos 1730 aviones, entre bombarderos y cazas, la RAF unos 940, la gran mayoría eran Hurricane y Spitfire. Habían muerto aproximadamente unos 500 pilotos ingleses, pero el peligro de invasión a la Gran Bretaña había quedado atrás. Por esto el Primer Ministro Churchill dijo sus famosas palabras: “Nunca tanto habían debido tanto a tan pocos.
” DIRECTIVA DE GERMANN GÖERING DE PRINCIPIOS DE NOVIEMBRE DE 1940
1) Londres sigue siendo el objetivo principal: a) de día, mediante ataques con cazabombarderos escoltados, y cuando esté nublado, con bombarderos sin escolta; b) por la noche, ataques con fuerzas equivalentes de las II y III Luftflotten.
2) Ataques con fuerzas reducidas a las zonas industriales de Coventry, Birmighan y Liverpool
3) Minado del Támesis, canal de Bristol, Mersey y canal navegable de Manchester por el IX Fliegerkorps.
4) Destrucción de los talleres de producción de motores de aviación Rolls Royce en Hilligton (Glasgow) por el III/KG 26, que utilizaría el Y-Gërat para la localización del blanco.
5) Hostigamiento de la caza enemiga con incursiones frei jagd (caza libre)
6) Ataques con escolta de cazas, a convoyes en el Canal, y a la navegación en el Támesis.
7) Destrucción de la industria aeronáutica enemiga por tripulaciones especiales de las II y III luftflotten.
Ataques a las bases de la caza nocturna aliada.
9) Preparación de ataques a Conventry, Birmighan y Wolverhampton mediante la utilización de X-Gerät, dirigidos por el Kampfguppen 100.
Es la opinión generalizada de que la Luftwaffe fue vencida por el Mando de caza de la RAF en ese período que comprende de Mayo a Novienbre de 1940. Sin embargo, esto nos parece una afirmación algo simplista, ya que el resultado de la batalla debe verse desde distintos puntos de vista.
Reflexiones finales
Si vemos la pèrdidas de ambos bandos caza contra caza, los del Mando de Caza británico son iguales a superiores a los de las Jagdgruppen. Desde este punto de vista, no estoy de acuerdo con que la Luftwaffe perdió. El famoso dicho de Galland a Göering "denos unos cuantos Spitfire", me parece que le han exagerado su importancia.
Los británicos se estaban quedando sin pilotos de caza, lo que significa que, si vemos esto como un combate piloto contra piloto, fue una victoria alemana.
Recordemos que, las grandes bajas alemanas de aviones, correspondía en su mayoría a bombarderos (estas pérdidas eran insostenibles, pero aún así estaban los alemanes pagar ese sacrificio de hombres y máquinas), en cambio que todas las bajas inglesas eran de caza.
Solo un hecho fortuito salvo a los británicos de perder el dominio del aire en el sureste inglés. (Un bombardeo mal calculado sobre Londrés), cuando aún estaba prohibido el bombardeo a la población civil
Ya desde Junio o Julio de 1940, Hitler ya estaba pensando en invadir a la URSS. Hitler en el fondo buscaba que los ingleses se rindieran, lo intento con los bombarderos. Al ver que los ingleses estaban por los momentos contenidos, se dirigió a la URSS.
Solo desde un simple punto de vista estrátegico, la no ejecución del plan Sëlowee (la invasión de Inglaterra) es el fundamento para decidir que la Luftwaffe perdió la batalla, En todo caso, perdieron las Kampfgruppen, no las Jesghwader. Pero repitó, eso fue una decisión temprana de Hitler.
Autor: GaetanoLaSpina
Fuentes:
Bishop E. La Batallade Inglaterra, editorial san Martin, 1975
Bekker C. La Luftwaffe, 1970
Enciclopedia ilustrada de la Aviacion
Enciclopedia ilustrada de la Aviacion P-482
Enciclopedia ilustrada de la Aviación. Historia de la Aviación. El Blitz nocturno. p-484
Tony Wood y Bill Gunston. Luftwaffe. El Tercer Reich. p-28 y 29
Enciclopedia Maquinas de Guerra. Artillería antiaérea pesada. Fascículo 60. pag 1194.
Escuadrones de Blenheim de la IIGM Jon Lake - Editorial del Prado (traducción del Osprey) 2000
.